Ruben Blades, Maestra Vida, Fania, 1980



Carmelo se llamó mi abuelo. Carmelo es el patriarca de los Da Silva en esta primera (y única) ópera salsa. Carmelo Puliafito y Carmelo Da silva fueron sastres, uno de Panamá, el otro de Barcellona Pozzo di Gotto primero y para la BNPB después. El verdadero vivió demasiado poco, tan sólo cuatro años de mi vida, dos de la de mi hermano, y tres menos que los de mi hermana. El de ficción, sobrevivió a su esposa, y esperó por años a un hijo a quién supuso rufián, y que nunca llegó. Al Da Silva hijo no lo dejaron salir del trabajo para el funeral de su padre, y los comentarios del barrio lo creyeron tras las rejas, riéndo la muerte de su progenitor. El 'baila pa' mí, mami' se encuentra ausente de esta obra, es el transcurrir de la vida, enfrentándose a su aliada y protagonista del relato de Blades: la muerte. Obra prohibida y olvidada, luego del monumental éxito de "Siembra", apela al clásico color local americano no como ganch comercial, sino como marco para la vida, tan parecida y tan secular, de tres generaciones de Da Silva, en un Panamá tan universal como los temas que toca: el machismo, la paternidad, la decepción de los hijos ante las pretensiones excesivas de los padres, el bar, la soledad, y el punto final. Son dos discos, el primero que versa sobre Carmelo da Silva, Manuela Peré y la alegría de vivir; el segundo sobre Ramiro da Silva, el sufrimiento del hombre, la soledad y el final. Podría seguir escribiendo horas sobre las infinitas aristas de esta obra, pero la estoy escuchando completa por enésima vez, y prefiero que ustedes vayan desgajándola por su cuenta. "El nacimiento de Ramiro" fue la canción que instantaneamente oí cuando llegó Juan Manuel Libre al mundo, no deja de hacerme caer algunas lágrimas. "Manuela" fue la primera canción que él bailó, al mes de nacido, moviendo su cabecita como poseído. Y "Maestra vida" (perfecto tempus fugit) me hizo tomar conciencia de algo que había olvidado. Porque cuando se murió Carmelo sentímos un dolor tan profundo que no hallamos nada en el mundo con que poder consolarlo.

A tu escuela llegué sin entender porque llegaba
en tus salones encuentro mil caminos y encrucijadas
y aprendo mucho y no aprendo nada.
 
(Maestra vida camará’a, te da, te quita, te quita y te da)
 
Paso por días de sol, luz y de aguaceros,
Paso por noches de tinieblas y de lunas,
Paso afirmando, paso negando, paso con dudas
Entre risas y amarguras, buscando el porque y el cuándo.
 
(Maestra vida camará’a,  te da, te quita, te quita y te da)
 
Maestra vida, de justicias e injusticias
De bondades y malicias aun no alcanzo a comprenderte
Maestra vida que ese culpo no perdona
Voy buscando entre tus horas el espejo de los tiempos
Para ver tus sentimientos      
y así  comprender tus cosas.
 
Y ví espinas y ví rosas, 
Ví morir seres queridos, ví bellezas, fui testigo
De maldades y de guerras
Ví lo bueno de la tierra
Y ví el hambre y la miseria, y entre el drama y la comedia 
avancé entre agua y fuego.
En Dios me acuerdo primero
Solo en trance de morirme
O a veces cuando estoy triste, más nunca si estoy contento.
No dura agradecimiento.
Pa’ aquel que nos da la mano 
tan pronto nos sale el clavo
Se olvida to’o el sufrimiento.
 
Y tengo amigos, conocidos y enemigos,
amores que me han querido
Y rostros que niegan verme.
Me encontré frente a la muerte 
y en sus ojos ví el sentido
y con el miedo conmigo
Así yo aprendí a quererte.
Y hoy sé que nada es seguro
Ya que todo es pasajero
La muerte es el mensajero que con la última hora viene
Y el tiempo no se detiene,
Ni por amor, ni dinero,
La muerte es el mensajero que con la última hora viene
Y el tiempo no se detiene,
Ni por amor, ni dinero.
 
Maestra vida, me voy persiguiendo al tiempo
A ver si encuentro respuestas,  antes de la hora en 
que yo muera
Aunque me estoy resignando a esta fatal realidad. 
 
(Maestra vida camará’a,  te da, te quita, te quita y te da)
 
Oye, cuando tú menos lo esperas
Va la sorpresa camara’a
Y el tiempo, mira no se detiene
Ni por amor, ni por dinero,
La muerte, compa’, la muerte es el mensajero,
Que con la última hora viene.
 
Cuando se murió Carmelo
Sentí un dolor tan profundo
Que no hallo nada en el mundo
Con que poder consolarme.                         
 
Te da, te quita, te quita y te da

7 pálidas ideas:

bonito lunch dijo...

buenisimo el maestro bleids.
en el año 83 vino por primera vez(creo que ese era el año) y toco en obras con los abuelos de la nada.
era una especie de soporte.
llevamos a mi cuñadito de once años a ver a abuelos, pero mi mujer y yo ibamos a ver al gran ruben.tenía una banda del carajo con la peculariedad de no tener caños, tan afin a la musica afro-caribeña.
el tio tenia un rollo con que la musica sea llamada salsa,ese nombre que le pusieron en niuyok.
cuantos recuerdos.

Anónimo dijo...

sabés que nunca me puse a escuchar a Blades? a Chabuca, si, claro. Pero a Blades voy a tener que dedicarle un rato.

Pablo Libre dijo...

Su anecdotario de recitales se me hace harto interesante BL. la verdad que algún día debería recopilarlos (si mal no recuerdo en su viejo blog había un post parecido a eso). Lo bueno es que vio a muchos grandes en su momento justo, porque la verdad es que yo pagaría por haber visto a Blades con esa formación y en ese momento, hoy no lo creo. Ese es el problema con los artistas que llegan acá: o vienen cuando adolescen de tacto escénico, o cuando están acabados.

Mirma: yo sé que si le das una oportunidad a este Blades, va a pasar a ser uno de tus favoritos... creo que después de ahondar en tus gustos, por lo visto en tu blog, sería la banda de sonido ideal para tus mejores posts, que son aquellos que versan sobre tu background personal (los de madre, padre y abuelas son realmente emocionantes)

Blades es de esos pocos artistas respetables por el sólo hecho de haberse arriesgado en su momento de mayor éxito, algo que los artistas populares de hoy ni imaginan hacer, además de haber reemplazado a un mito como Héctor LAvoe y ser aún mejor que él, y de haber pasado los 40 años con toda dignidad, algo que no he visto en ningún músico de hoy.

bonito lunch dijo...

mire que ruben saco un par de discos ultimamente que son realmente buenos.
toca con un trio de costa rica que se llama editus (cito todo de memoria, algo puede estar wrong).en uno de estos discos cantan un tema unas chicas cordobesas tremendas(un cuarteto vocal)-

Anónimo dijo...

Reconozco que mi cultura musical latinaomericana es muy pobre.
Pedro Navaja no me gustó nunca, no lo puedo disimular.
A Chabela no la puedo escuchar más que un ratito.
Escuchaste a Teresa Vera? Mi tío cubano me la hizo conocer...que belleza.
Y aunque sea grasún un disco que me impactó mucho fué Café con aroma de mujer. Ya sé que es de novela, pero...a mí me gustan las canciones de novelas....Síííííí.

Pablo Libre dijo...

De cUba, sólo tengo las grabaciones completas de Benny Moré, después cero Cuba. Mi mujer tiene todo lo de la trova y ufff, me parece insoportable. Junto con el bolero, serían los dos géneros que menos me atraen.
Y ultimamente, no es nada malo que uno gust de la música de novelas, si pones canal 11 o 9, casi todas las bandas de sonido de novelas son canciones de Marisa Monte, Joao Gilberto, y en los 70/80 hubo aportazos de Ivan Lins, Jorge Ben y hasta Flor de Lis de Djavan.

Caia dijo...

posteé aquí pero podría haber sido en cualquier otro topic. Es un gusto leerte, no solo aquí, en tu blog, sino también en otros donde dejás una opinión sincera, coherente, madura. Un saludo.