Beulah, When Your Hearstrings Break, Sugarfree Records, 1999


De este disco se despega un poco la historia de mi vida. Cuado lo compré, en 1999, vivía en Coghlan, cerca de Avenida Cabildo, e iba al instituto a estudiar cine caminando. No trabajaba, por lo cual tenía mucho tiempo para leer, hacer música y estar solo. Encargué este disco en "El Oasis", me lo trajeron al mes por sólo $26, lo que equivalía a uS$ 16 mas gastos de envío. No sé ahora, pero para aquella época era el único que lo tenía acá, apenas salido, luego de escuchar, 'If we can land a man to the moon...' en el site MP3.com

Hoy, en 2008, vivo en Bernal Oeste, calles de tierra, carreros que vuelven de cartonear, y una hora y media de viaje hacia mi trabajo nocturno de 9 horas. Estudio Letras, recursando materias que aprobé con 10 hace 3 años, pero que se me vencieron por no poder rendirlas cuando daba clases de Inglés y Lengua. No puedo grabar mis canciones, porque mi placa de sonido es lo más parecido a una fabrica de ruido sucio. Pero cuando llego a casa me encuentro con un mundo que no cambiaría por nada. Mi mujer y sus fotos, mi hijo cantando con el viejo micrófono Aiwa y tocando la armónica, mi pitbull cuidando la casa y atropellandome con su musculatura. Y ya no me acompaña más el pop de Beulah, que recaté de la casa de mi hermano y hoy subo para ustedes.

De la primera época guardo lo feliz que fui sin necesidad de dinero, por el solo hecho de poder caminar un domingo mirando las casas embrujadas de Belgrano R. De la segunda, la conciencia de saber que uno tiene que respetar el lugar donde vive, más allá de que sea Zona Norte, Zona Sur, tierra o asfalto.
Siempre digo que para D'elia yo sería una especie de inclasificable, un eslabón perdido entre su puta oligarquía y los compañeros sureños. Viví en Belgrano, y no volvería. Vivo en el Sur, y me iría gustoso.
Lo que sí, nunca volvería el tiempo atrás, porque imagino mi vida sin Juan Libre e Ive Brussel, y me envuelve la tristeza cósmica.

Bajen este disco, van a encontrar placer los beatlemaníacos (no se porqué, pero hay muchos aquí), los beachboysmaníacos (más si gustan de la era post '66), los noventosos (pueden adelantarse al retro que se viene). Digamos que si entran en cualquiera de esas categorías, it's a must, no pueden pasarlo de largo, más aún teniendo en cuenta que no es algo fácil de conseguir, es accesible al oído y de una belleza cuasi perenne.

3 pálidas ideas:

Anónimo dijo...

qué coincidencias.
en mi cuaderno encontrarás un post ¨Mudar, mutar¨. Cuando tengas un ratito leelo.
yo tambien dejé vencer mis materias de Letras a punto de recibirme: elecciones de vida.
me emociona tu relato de la llegada a casa: quién puede ser feliz sin ese decorado?
por último, acepto lo de Toxemodoon o como se llame. El tema tenía la palabra moon o sunset, creo, no llegué a retenerlo. Posteate algo sobre estos pibes, no sé nada de ellos.
Muy, muy lindo post. Un abrazo a toda esa hermosa familia incluído el pit. Yo tuve dos bulldogs ingleses y ahora quisiera dos franceses. Pero siempre bull. El tuyo es blanco con ojito pirata?

Pablo Libre dijo...

Leí el post sobre tu bulldog, mi carolina (se llama así por las canciones de Chico, Seu Jorge, Beach Boys y Lou Reed) es casi tan revoltosa como lo era el tuyo. Los de la mancha en el ojo son los bull terrier, estoy por comprarme uno de esa raza.
Ahora cuando llegue a casa subo el disco de tuxedomoon, "half mute".

Anónimo dijo...

ah, cierto. El bull terrier! me encanta. Pero al pit le tengo demasiado respeto.