Regresando a esta sección que me trajo amigos y dolores de cabeza, voy a hacer un seguimiento canción por canción de un disco que DEBEN bajar sí o sí, un imperdible. Desde la mejor portada de la historia hasta las colaboraciones de Richard & Danny Thompson (nada que ver entre ellos, su único nexo es que son de lo mejor del folk y jazz inglés, respectivamente)
Dedicado a el pequeño gigante Nick Drake mientras éste atravesaba su última depresión, John Martyn logró un disco relajado, de eso que se llama cool ahora, pero al mismo tiempo le dió una técnica y relieve a las canciones que pocas veces he oído.
Para bajar este regalo de fin de año para mis amigos, deben pinchar sobre la excelente foto de portada. Ahí va mi juicio:
1. Solid Air (10): De pequeño, había una canción de un disco mediocre de Mad Season, "Long Gone Day", que lograba que entre en trance cada vez que la escuchaba. Buscaba cosas parecidas, y llegó Solid Air. Se oyen los golpes de guitarra, el contrabajo que moldea el viaje, la voz bostezada de Martyn. Esto es Nick Drake, no porque la canción lo emule, sino porque imagino así sus pensamientos en el cuarto de su casa paterna. Supongo que, si el idiota de Ian Curtis se ahorcó escuchando Iggy Pop, en proporción Drake debió haberse dormido para siempre oyendo esta canción.
2. Over the Hill (7): Un temita amable, la mandolina de Richard Thompson le suma varios puntos, la letra y el swing no trasciende de lo que se hacía en la época en el circuito folkie.
3. Don't Want to know (9,5): le resto 5 centésimas porque Santana hizo el cover. El xylophone lo introduce en una esfera de ensueño; la letra, en el mood adecuado, puede tocar fibras íntimas. Atención que vale la pena llegar al solo de piano eléctrico.
4. I'd Rather Be the Devil (7,5): Muchos lo señalan como "el tema" del disco. A mí me gusta, y no mucho más.
5. Go down easy (8): Acá llegó mi amado folk inglés. Si este tema hubiera salido en los 90, hecho por un grupito grunge, hubiese sido N º 1. Éste me dice más de Drake que Solid Air, es más, podría haberlo grabado el duende de los zapatos pequeños.
6. Dreams by the sea (7,5): Un blues con la cuota de magia británica. Acá se le dá más espacio a los instrumentos eléctricos, que se esconden bastante bien anteriormente.
7. May you never (8,5): Tracy Chapman se cuela en el disco (no lo crean, el negrit@ aún ni había planeado matar a Lennon en esa época..era Tracy, no?). Me mata como toca la guitarra John Martyn, y su voz aún más. Entre bostezo, Billie Holliday y country.
8. The Man in the Station (10): EL TEMA del disco. No digo más para no quemárselos.
9. Easy Blues (7): El título reza su contenido. Ahora, traten de tocar así la guitarra aquellos que saben.
10. I'd rather be the devil (4): una cagada.
Bueno, me despido por ahora, mañana viajo, así que si no llego a confeccionar el último post del año, los saludo como empecé, subiendo discos para que podamos compartir la música que más nos gusta: la bien hecha.
En mi pequeño balance del año, las dos frases más idiotas de 2008:
1- "Esta bueeno", aplicado a todo
2- "Escucho de todo, menos cumbia", típico dicho de alguien a quien hay que colgar de ya-saben-donde.
Beijos.
Quedándome o yéndome: ante-último post del año, John Martyn, "Solid Air", 1973
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